Sábado 17 de mayo, a las 12:00, Aula de Pensamiento de Motril, en su sección Refugio de Versos, me brindó un magnífico encuentro poético para la presentación de mi poemario "El aire en la vela".
¿Cabría imaginar un espacio más envolvente, una acogida más generosa, un encuentro más estimulante? Ni en sueños. En el breve espacio de poco más de una hora, los habitantes de este pueblo costero granadino, con olor a mar y a esencia exótica, me ofrecieron una familiaridad sin parangón y un respeto recíproco que selló lo que ya considero una amistad duradera.
Antonio Chicharro hizo un análisis tan meticuloso como encomiástico de mis versos, con un trato personal sin formalismos.
Gerardo Martín, como gestor de un espacio cultural tan auténtico, no sólo me dio todo tipo de facilidades durante los preparativos sino que en todo momento fue apoyo incondicional y promesa de futuras colaboraciones.
La respuesta de los asistentes, que eludo mencionar para no incurrir en el olvido de algunos de sus nombres, fue una demostración de afecto y consideración.
Lo dicho, vuelvo de Motril y de su Refugio de Versos como si me hubiera sido concedido el privilegio de visitar un Paraíso. Gracias.
He aquí un conciso reportaje fotográfico del acto, en el que no faltó ni la dedicatoria personal en el libro de firmas del centro, rodeado de una puesta en escena mágica. Las fotografías son cortesía de Javi Arellano y Juan José Cuenca.
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